En la lectura de Judith Meece “Desarrollo del niño y del adolescente” se habla a cerca del desarrollo del alfabetismo, donde se mencionaba que el niño tiene contacto desde pequeño con los textos y en su proceso alfabetizador va a influir si se desarrolló en un ambiente letrado ya que esto le ayuda a su alfabetización porque ha tenido contacto con los textos, el en su familia observa que tienen el habito de la lectura y que leen por placer y no porque obligación.

El niño desde muy chiquito se da cuenta de que existe la escritura, finalmente el niño llega a la conciencia fonética que es la capacidad de conectar sonidos distintivos de las palabras con letras.

Otro aspecto que se puede mencionar es que gracias a repetidos contactos con una lectura leída en voz alta, los niños pequeños pronto comprenden que lo que un lector adulto dice depende o se basa de lo que se encuentre escrito en el libro y no se están inventando las palabras o frases.